A confesión de castañeta, absolución de zapateta.

A confesión de castañeta, absolución de zapateta.
Anuncia el mal resultado de ser insistente en asuntos de poca importancia. Como aquel clérigo que, según cuenta Vital Aza, harto de oír a la gimoteante penitente decir: «Señor cura, tengo aquello; señor cura, tengo lo otro...», arremangó el manteo y le espetó: «¡Lo que tienes, hija mía, es ganas de fastidiarme!».

Diccionario de dichos y refranes. 2000.

Игры ⚽ Нужна курсовая?

Compartir el artículo y extractos

Link directo
Do a right-click on the link above
and select “Copy Link”